04.03.2009 y 05.03.2009 VIAJE MOVIDITO

Esta noche apenas hemos dormido con los nervios del viaje, habian quedado en recogernos a las 9.30 horas para llevarnos al aeropuerto, pues el vuelo salía a las 10.55 horas, antes de las 7.00 horas nos levantamos, recogiendo las últimas cosas para las maletas, y cuando ya estabamos esperando, suena el timbre, era Zhanat con la limpiadora, y nos dice que nos quedemos que hay un problema con el vuelo que de momento no sale a esa hora. Que más tarde llamará para saber a que hora sale, nos quedamos en el apartamento, mientras la chica limpiaba, nos ha hecho mucha gracia, pues ha vuelto a limpiar lo que yo habia limpiado ayer, y otra cosa que nos hemos dado cuenta, aquí todavía no han llegado las fregonas, todo a mano y de rodilla, menos mal que tienen muy poco suelo que limpiar, pues casi todo es moqueta o alfombra. A las 12.00 horas suena el timbre otra vez, esta vez era Zhanat, el marido, con Nieves y su madre, resulta que se iban a instalar en el piso, ya supuestamente se nos había acabado el tiempo del piso, así que ellas nos han dejado quedarnos, Zhanat nos dijó que el vuelo salia a las 15.00 horas así que nos recogia a las 13.00 horas y a Nieves a las 14.50 horas para ir al orfanato. En todo ese tiempo que era una hora, ya sabes de chachara todo el tiempo. Cuando suena otra vez el timbre Zhanat, para decir, problema, y ahora no sabía si era para nosotros o para ellas, como siempre los problemas a nosotros. Resulta que el vuelo no salia, según dicen por mal tiempo, que todavía no nos explicamos eso del mal tiempo, pues solo estaba nublado. Ahora pensando que el vuelo de Astana lo teníamos a las 4.45 y no sabiamos si al no haber vuelo no llegabamos a tiempo, y otra vez a pagar suplementos. En ese momento llamó Gala porque resulta que se le acumulaba el trabajo a Zhanat, ahora resulta que venian a recoger a Nieves y su madre para ir al orfanato, pues habia surgido un problema a la médica y querian verla antes de las 13.30 horas, nosotros sin saber como solucionar el problema, y la única solución que nos dieron era ir en coche hasta Astana, claro nosotros de momento vimos el cielo abierto, preguntamos más o menos el precio y nos dijeron 350€, pero queriamos recuperar el dinero de los vuelos cancelados. Así que el marido de Zhanat nos llevó a la agencia y de momento le devolvieron los 40.000 tengues. 1º problemilla solucionado, ahora quedaba, quien era el guapo que nos llevaba, y ya eran las 14.00 horas. A las 14.45 horas nos llama Zhanat por teléfono que ya había subido hoy varias veces al 5º sin ascensor para decir que bajara que nos iba a decir algo. Angel bajó y era que a las 15.00 horas nos recogia el chofer que nos llevaba. Que nos cobraba 40.000 tengues, es decir el mismo dinero de los aviones. Y así fue. Aquí empieza la aventura, primero sin saber exactamente los kilómetros que hay, pensando como mucho habrá 300 o 400, primer palo 708 kilometros, el chofer corría demasiado, yo iba superasustada, Angel regular, las carreteras al principio comarcales, pero después se convirtieron en camino de cabras, y ponía señales máximo 40 y el siempre a 80, 90, 100 y la verdad que se nos puso más de una vez de pajarita, luego desde que puso 245 kilometros a Astana hasta que quedaron 28 no vimos ni un cartel para saber los kilómetros que quedaban, ni siquiera la dirección que seguiamos. Y encima todos esos kilómetros de noche, algunas veces, niebla, otras veces, socavones que entraba el coche, otra veces nubes de polvo que no se veía nada, muchos adelantos a camiones, en fin, una angustiosa aventura. Teniamos pensado desde por la mañana quedarnos en el hotel, ducharnos, descansar un poco, y al final nada, con lo tarde que hemos llegado, ya no nos merece la pena. Esperemos que sea la única anécdota. Los demás vuelos se nos han dado bien, aunque muy cansados, en mi vida he estado tan cansada. En en aeropuerto Estambul, nos dijeron si queriamos irnos en el vuelo que salia más pronto y dijimos que si, así llegabamos más pronto a territorio español. Nos tomamos un café mientras esperabamos, un atraco a mano armada, 2 cafés 10€. En aeropuerto de Estambul aparte de grande, muy bonito. Cuando llegamos a Barcelona, que alegría ya nos quedaba sólo un vuelo, aunque salía muy tarde, pero nos recogieron unos familiares y echamos un día muy agradable. Sólo fue salir del aeropuerto y vaya olor, carne a la brasa, que hemos echado la comida Española. La más buena del mundo. Hacía mucho aire y nos daba un poco de respeto volar, pero al final llegamos salvo y salvo a Sevilla a las 1.00 de la madrugada, estaban esperandonos mis padres y muy bien. Por fin en casa, nos duchamos y a dormir, que falta nos hacia.